Este jueves se realizó el acto conmemorativo por el 31° aniversario del atentado a la AMIA, el ataque terrorista más grave en la historia argentina, que dejó 85 víctimas fatales y más de 300 heridos. El encuentro, realizado frente a la sede reconstruida de la mutual judía, contó con la presencia de familiares de las víctimas, dirigentes comunitarios, autoridades políticas y representantes diplomáticos.
En su discurso, el presidente de la AMIA, Amos Linetzky, reiteró el pedido de justicia y cuestionó la falta de avances judiciales en la causa. “Hace 31 años que esperamos una respuesta. ¿También tendremos que esperar 30 años más por la muerte del fiscal Nisman?”, planteó, en referencia a la investigación aún abierta sobre el fallecimiento del fiscal que denunció un presunto encubrimiento del atentado.
Linetzky también alertó sobre la supuesta infiltración iraní en la región, y llamó a redoblar esfuerzos para prevenir el accionar de grupos vinculados al terrorismo internacional. “No es una amenaza abstracta. Existen estructuras que siguen activas”, sostuvo.
Durante el acto se leyó un listado con los nombres de todas las víctimas, se encendieron velas en su memoria y se realizó un minuto de silencio a las 9:53, hora exacta del atentado ocurrido el 18 de julio de 1994.
El acto contó con la participación de autoridades nacionales y provinciales, referentes de organizaciones de derechos humanos y representantes de diversos credos religiosos. La consigna “Justicia, justicia perseguirás” volvió a marcar el tono del homenaje.