El dólar mayorista escaló este jueves hasta $1.374, en una jornada marcada por fuertes tensiones cambiarias: significa ya un incremento mensual del 14 % en julio. Al mismo tiempo, se acerca al techo actual de la banda de flotación, que fue ajustado en un 1 % mensual desde abril y se ubica hoy en $1.450,31.
Según el esquema monetario vigente, si el tipo de cambio supera ese límite, el Banco Central está obligado a vender divisas para contener la suba y absorber pesos sin esterilizarlos.
Desde el Ministerio de Economía, encabezado por Luis Caputo, celebraron que el índice de tipo de cambio real multilateral –que mide la competitividad del peso frente a los mayores socios comerciales– alcanzó su punto más alto en 14 meses, superando el 20 % de mejora acumulada en lo que va de 2025. Esa evolución, afirmaron, alivia el atraso cambiario sin haber desencadenado un traspaso inmediato a precios.
Caputo destacó en su cuenta de X que “el tipo de cambio real multilateral está cercano a 102,67 desde 2016, y sin efecto inflacionario” aunque luego rectificó que esa cifra era para la comparación con EE. UU.
Desde consultoras como LCG y Wise Capital advirtieron que las razones del repunte cambiario son múltiples: desde un menor ingreso de divisas por parte del agro —debido a limitaciones en las liquidaciones— hasta un exceso de pesos en circulación tras la eliminación de las LEFI. A ello se suma la demanda típica preelectoral de cobertura en dólares.
A pesar de estas presiones, Caputo confirmó que en los últimos 35 días el Tesoro y el Banco Central adquirieron unos USD 1.500 millones en el mercado spot, en parte para apuntalar las reservas y fortalecer la solvencia externa del país.
Según reportes del mercado, si el dólar mayorista supera el techo, el BCRA deberá actuar obligatoriamente, reduciendo el margen de maniobra monetaria oficial. Por ahora, la moneda permanece dentro de la banda, aunque con apenas un 6 % de distancia para llegar al límite superior.